Agua tibia con sal...un remedio muy eficaz

Afecciones que se pueden tratar con agua con sal son:
-sangrado de encías
-dolor e inflamación de gargantas
-sinusitis
-hinchazón y dolor en los pies
-afonía
-fiebre del heno
-aftas o ampollas en la boca
-dermatitis
-hongos en los pies
Para preparar este remedio se debe colocar en una taza o vaso agua tibia y colocar adentro 1 cucharadita colmada de sal gruesa. Se revuelve y luego se puede hacer gárgaras o buches según que afección se desea resolver. No se debe tragar esta agua salada.

Para realizar vapor o lavados se coloca un recipiente más grande con agua tibia y se coloca 2 o 3 cucharadas de sal gruesa. Para poder resolver o aliviar patologías con agua con sal se debe usar 2 o 3 veces al día para que haga efecto más rápido. El agua con sal es un remedio simple, económico pero sobre todo efectivo para el tratamiento de varias afecciones por lo que vale la pena usarlo cuando lo necesitamos.
Además
Es sabido que la sal ayuda a curar el cuerpo: aplicar sal a una herida hace que cicatrice más rápido y sumergir manos o pies en agua con sal desinflama. En la boca se ha demostrado que es muy beneficiosa usada cómo enjuague ya que interviene en varios procesos:

Desinflama las encias

La inflamación es un proceso en el cual hay acumulación de líquido.
La sal que se absorbe a nivel tópico no entra dentro de las células, se queda en el líquido intercelular, haciéndolo hipertónico. Para compensarlo la célula se deshidrata, expulsa el líquido, y por eso la zona se desinflama más rápidamente.

Ayuda a prevenir las caries


Con la comida el pH de la boca cambia, se acidifica, y facilita la desmineralización del esmalte dental, que favorece a las bacterias de la caries colonizar el diente.
La sal a nivel tópico ayuda a regular el equilibrio ácido-básico gracias al intercambio iónico, a través de la membrana celular, entre el sodio y el potasio. Acelerando el equilibrado ácido-básico el diente no se desmineraliza tanto, empieza a remineralizarse, y a las bacterias les cuesta más formar la caries.

Previene el mal aliento


En el 90% de los casos, el mal aliento tiene origen en la boca. La principal causa de la halitosis es bacteriana. En la boca son comunes bacterias que se alimentan de los desechos de comida no removida durante el cepillado. 
Las bacterias originan compuestos sulfúricos volátiles (gases malolientes) que se evaporan de forma rápida y son exhalados en el aliento.
Mediante el cambio brusco de pH que se provoca en la boca con el equilibrio ácido-básico del agua con sal, algunas de estas bacterias son eliminadas disminuyendo la aparición del mal aliento.
Además enjuagar agua tibia con sal ayuda a arrastrar restos de comida no removida con el cepillo ni el hilo dental, desinfecta, ayuda a calmar el dolor y a la curación de pequeñas heridas en la boca.
Sin embargo debo recordar que el exceso de sal puede provocar patología en otras partes del cuerpo, y no todos necesitamos enjuagarla, por eso es importante consultar al odontólogo cada caso en particular.

Enjuague de agua salada

Un concepto importante a recordar cuando se prepara un enjuague de agua salada es usar agua tibia. El agua fría no es tan eficaz por dos razones: agrava los dientes sensibles y no disuelve la sal. 
Puede que no te des cuenta de que tus dientes son sensibles, pero si les aplicas agua muy fría, sin saberlo, puedes experimentar un malestar significativo. Lo mismo sucederá si el origen del dolor de las encías es una caries. Debido a que las caries son una ruptura en parte de la superficie del diente, el nervio del diente es más susceptible a afectarse.
Otro de los beneficios del agua caliente es que funde los cristales de sal. Esto permite que las propiedades calmantes de la sal se consuman en el agua y lleguen a las grietas pequeñas de la boca, por ejemplo a un absceso. La sal drena el absceso y elimina un poco el dolor.

Pasos a seguir


  1. Vierte la sal en el interior de un vaso de agua y remueve el líquido hasta que la sal se haya disuelto.
  2. Usa la mezcla para realizar enjuagues bucales 3 veces al día.
  3. De este modo, conseguirás que la sal desinfecte las heridas en la boca, las cure y las haga desaparecer de una vez por todas en muy poco tiempo.
  4. Recuerda que, en ocasiones, la sal puede traer consigo un ligero escozor al entrar en contacto con las heridas, pero no tienes que preocuparte, ya que es algo completamente normal.
  5. Pon en práctica este truco de salud natural todos los días hasta que las heridas que se han instalado en tu boca desaparezcan por completo.

Los beneficios de este truco para cuidar la salud bucal utilizando agua y sal son los que enumeramos a continuación:

  • Acelera la curación de las heridas que se instalan en el interior de la boca.
  • Es económico, natural y fácil de preparar. Además, podrás comprar sal fina por muy poco dinero en tu supermercado más próximo.
  • Solo tendrás que dedicar unos pocos minutos a su elaboración, ya que a la hora de ponerlo en práctica lo único que hay que hacer es mezclar una pequeña cantidad de sal marina con un poco de agua.